Jorge Toro
Miembro Conocido
Si de pronto en tus sueños, cierto día,
aparece en la bruma una figura
que te mira con cálida ternura
y a la vez con atroz melancolía…
Si de pronto despiertas, juraría,
sentirás al instante, por natura,
que es mi espíritu preso de amargura
implorando descanso todavía…
Si de pronto recuerdas, vida mía,
le pasaste a mi falta cruel factura
y dolida, tal vez con desmesura,
me apartaste tu dulce compañía.
Y no pude con ello, no vivía,
los pesares batieron mi armadura
y perdida de a poco la cordura
divagué por el mundo en agonía.
Devastado, una tarde, -que ironía-
ya no pude afrontar tanta tortura
y busqué con la muerte -cruel criatura-
esa paz que jamás recobraría.
Ese salto, pensé, redimiría
el estúpido error de mi aventura,
pero ves, mi periplo a la negrura
se aplazó por mi bárbara osadía.
Me impidieron tomar la travesía
hasta tanto se absuelva mi locura
y por tanto en fantasma que perdura
estaré hasta purgar mi alevosía.
Aunque a ti te parezca tontería
aseveran que tú serás mi cura,
si decides romper la cerradura
entregándome al fin una amnistía.
Si de pronto, cargada de empatía,
visitaras mi fría sepultura
deseando indultar mi felonía…
Te suplico no sea en noche oscura,
en tal lapso verás que está vacía
pues escapo a llorar mi desventura…
aparece en la bruma una figura
que te mira con cálida ternura
y a la vez con atroz melancolía…
Si de pronto despiertas, juraría,
sentirás al instante, por natura,
que es mi espíritu preso de amargura
implorando descanso todavía…
Si de pronto recuerdas, vida mía,
le pasaste a mi falta cruel factura
y dolida, tal vez con desmesura,
me apartaste tu dulce compañía.
Y no pude con ello, no vivía,
los pesares batieron mi armadura
y perdida de a poco la cordura
divagué por el mundo en agonía.
Devastado, una tarde, -que ironía-
ya no pude afrontar tanta tortura
y busqué con la muerte -cruel criatura-
esa paz que jamás recobraría.
Ese salto, pensé, redimiría
el estúpido error de mi aventura,
pero ves, mi periplo a la negrura
se aplazó por mi bárbara osadía.
Me impidieron tomar la travesía
hasta tanto se absuelva mi locura
y por tanto en fantasma que perdura
estaré hasta purgar mi alevosía.
Aunque a ti te parezca tontería
aseveran que tú serás mi cura,
si decides romper la cerradura
entregándome al fin una amnistía.
Si de pronto, cargada de empatía,
visitaras mi fría sepultura
deseando indultar mi felonía…
Te suplico no sea en noche oscura,
en tal lapso verás que está vacía
pues escapo a llorar mi desventura…
