Miguel Francisco Romero
Nuevo Miembro
SIEMPRE TUYO © Derechos Reservados del texto.
Autor: Miguel F. Romero 22/05/2013 Argentina.
Suplica mi voz por ti, en desiertos secos de llanto
abre tus brazos, libera la noche, cautiva en tu pelo
desátala en mi sed, de mi boca caliente, seca de fuego,
deja que nos cobije, sólo tú y yo, en su negro manto.
Quiero conquistar tu amor, con dulces palabras
dejaré quemarse mi alma, en tu gracia y hermosura
furia de volcanes, lava ardiente, en estéril locura
que calme mi pasión tan vasta, y te diré, mi amada.
Devuélveme, las tardes lujuriosas, caricias locas
entierra mis cenizas del alma, en tus carnales sombras
quítame, esta funesta ausencia, dolor que te nombra
y gime en mis entrañas, mi garganta, mi aliento, en mi boca.
Hazme sentir tus caricias, como el mar en sus laderas
que la luna en las noches, acaricia con su luz, entregada,
y la brisa que dormita y sueña, en la espuma de su oleada
embriagada y suspirando, gimiendo, en virginales entregas.
Quiero sentir de tus labios, palabras dulces, enamoradas
que apacigüen y mitiguen suavemente, mis sentidos
no quiero ser parte de tu ausencia, ni de tu olvido
siente, el grito de mi sangre, que late en la alborada.
Quiero sentir sobre mi pecho, tu piel suave, enardecida
encenderla con mis besos, avivarla, como el viento
arrebato de pasiones, para morir en fuego lento
amándote, deseándote, en impudicia apasionada.
Saltaré por ti, el abismo fatal, que nos separa, sin sentido
y te cobijaré entre mis brazos, en dulce movimiento,
olvidando extraviadas primaveras, triste tormento,
y perderme contigo, en las nubes del amor y del olvido.
Implora tu esencia mi cuerpo, hazme de ti, tu esclavo
dame todo tu ser, hasta el fatal suspiro del último aliento
quiero poseerte, tus brevas en gozo, arrebatos, gimiendo
dame las dulces caricias tus manos y tu boca, que yo te amo.
Quiero gritar el fragor, de mi amor loco, al viento
pasión de cuerpo y alma, pensamiento, unidos,
en íntimos, sensuales y calmos, paraísos perdidos,
tus latidos en astral sintonía, en dulce sentimiento.
Quero sentir de tus labios, la tibieza consentida
del amor verdadero, enamorado, en sutil sinfonía,
uniendo las simientes, en una perpetua armonía,
tu amor y mi amor, en todo el tiempo de la vida.
Siento que soy tuyo, que te pertenezco,
siento que por ti vivo, que me amas y te amo.
Nada será tan fuerte, tan lejano, tan estéril,
que no pueda vencer la fuerza del amor.
Autor: Miguel F. Romero 22/05/2013 Argentina.
Suplica mi voz por ti, en desiertos secos de llanto
abre tus brazos, libera la noche, cautiva en tu pelo
desátala en mi sed, de mi boca caliente, seca de fuego,
deja que nos cobije, sólo tú y yo, en su negro manto.
Quiero conquistar tu amor, con dulces palabras
dejaré quemarse mi alma, en tu gracia y hermosura
furia de volcanes, lava ardiente, en estéril locura
que calme mi pasión tan vasta, y te diré, mi amada.
Devuélveme, las tardes lujuriosas, caricias locas
entierra mis cenizas del alma, en tus carnales sombras
quítame, esta funesta ausencia, dolor que te nombra
y gime en mis entrañas, mi garganta, mi aliento, en mi boca.
Hazme sentir tus caricias, como el mar en sus laderas
que la luna en las noches, acaricia con su luz, entregada,
y la brisa que dormita y sueña, en la espuma de su oleada
embriagada y suspirando, gimiendo, en virginales entregas.
Quiero sentir de tus labios, palabras dulces, enamoradas
que apacigüen y mitiguen suavemente, mis sentidos
no quiero ser parte de tu ausencia, ni de tu olvido
siente, el grito de mi sangre, que late en la alborada.
Quiero sentir sobre mi pecho, tu piel suave, enardecida
encenderla con mis besos, avivarla, como el viento
arrebato de pasiones, para morir en fuego lento
amándote, deseándote, en impudicia apasionada.
Saltaré por ti, el abismo fatal, que nos separa, sin sentido
y te cobijaré entre mis brazos, en dulce movimiento,
olvidando extraviadas primaveras, triste tormento,
y perderme contigo, en las nubes del amor y del olvido.
Implora tu esencia mi cuerpo, hazme de ti, tu esclavo
dame todo tu ser, hasta el fatal suspiro del último aliento
quiero poseerte, tus brevas en gozo, arrebatos, gimiendo
dame las dulces caricias tus manos y tu boca, que yo te amo.
Quiero gritar el fragor, de mi amor loco, al viento
pasión de cuerpo y alma, pensamiento, unidos,
en íntimos, sensuales y calmos, paraísos perdidos,
tus latidos en astral sintonía, en dulce sentimiento.
Quero sentir de tus labios, la tibieza consentida
del amor verdadero, enamorado, en sutil sinfonía,
uniendo las simientes, en una perpetua armonía,
tu amor y mi amor, en todo el tiempo de la vida.
Siento que soy tuyo, que te pertenezco,
siento que por ti vivo, que me amas y te amo.
Nada será tan fuerte, tan lejano, tan estéril,
que no pueda vencer la fuerza del amor.
