margui
Miembro Conocido
El sol de otoño ya no alcanza
a calentar la madrugada fría,
una rica gama de oros y marrones
matiza el paisaje con sus tintes.
El errático amarillo de las hojas
juega a envolver la brisa fresca,
cuando sopla la ventisca.
En afán de bulbos y de nueces,
las ardillas se vuelven atrevidas;
las aves cubren de puntos el celaje,
las bandadas tallan en el cielo
flecha orientadas hacia el sur.
La mirada del hombre avizora
con melancolía,
el dulce letargo de la naturaleza.
El invierno se avecina
!Qué blancura gloriosa traerá consigo!
acamparán las luces en la nieve,
se harán profusos los pelajes.
El penetrante blanco vestirá las pieles
con su mimetismo glaciar.
El hombre cambiará sus botas de hule
calzará raquetas.
El sol de otoño se velará de gris.
a calentar la madrugada fría,
una rica gama de oros y marrones
matiza el paisaje con sus tintes.
El errático amarillo de las hojas
juega a envolver la brisa fresca,
cuando sopla la ventisca.
En afán de bulbos y de nueces,
las ardillas se vuelven atrevidas;
las aves cubren de puntos el celaje,
las bandadas tallan en el cielo
flecha orientadas hacia el sur.
La mirada del hombre avizora
con melancolía,
el dulce letargo de la naturaleza.
El invierno se avecina
!Qué blancura gloriosa traerá consigo!
acamparán las luces en la nieve,
se harán profusos los pelajes.
El penetrante blanco vestirá las pieles
con su mimetismo glaciar.
El hombre cambiará sus botas de hule
calzará raquetas.
El sol de otoño se velará de gris.
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