Brumario
Miembro Conocido
Soneto a una Dama
La elegante cadencia de tu paso
adoran mis pupilas contemplar,
al tiempo que un anhelo, sin igual,
se atreve, sí, a soñarte...entre mis brazos.
Llamo sendas de luna a tus encantos,
paraísos de dulce amenidad
por dónde hago poemas suspirar
y desvelos, tan sólo con pensarlos.
Ensueños que amanecen en el alma
oscilan entre un pronto y un...jamás;
lejanía que, no obstante, sabe a magia
tan sólo con tu nombre pronunciar.
Tu recuerdo es, en mí, preciosa dama,
un oasis de cálida ansiedad.
La elegante cadencia de tu paso
adoran mis pupilas contemplar,
al tiempo que un anhelo, sin igual,
se atreve, sí, a soñarte...entre mis brazos.
Llamo sendas de luna a tus encantos,
paraísos de dulce amenidad
por dónde hago poemas suspirar
y desvelos, tan sólo con pensarlos.
Ensueños que amanecen en el alma
oscilan entre un pronto y un...jamás;
lejanía que, no obstante, sabe a magia
tan sólo con tu nombre pronunciar.
Tu recuerdo es, en mí, preciosa dama,
un oasis de cálida ansiedad.