Maria Rial. issisora
Miembro Conocido
Tú mirada...
Alegría, tras ráfagas de vivencias, sentimiento.
El amor, que despierta entre notas majestuosas,
la energía vital, de nuestra sínfonica universalidad...
La confluencia de nuestras huellas,
liberando sellos,
para que emanen prístinos los ojos,
y como brote de suspiros enamorados
retorne cristalino el amor, a nuestra alma.
La ternura, abrazando con sigilo estos versos.
Esa mirada, arrullada con tibieza,
que viaja por el océano de mis ojos,
hacia donde nace, la caricia cantarina,
cultivada por la flor de tu sonrisa vivaz...
¡OH! rayo de luminoso esplendor,
música, poesía, vida eres...
¡Amado mío!...
Precioso el remanso
de tu cálido corazón,
diluido por este virtuoso espacio.
Donde llega, desbordado de ternura,
el inspirador, del rio dulce de mis besos,
y me convierte, en el piélago de su gozo.
Regocijada, en el cielo de sus ojos,
renace la mirada jubilosa.
Plena de ti… ¡Vida!
Derrama la esencia de este amor...
En cada latido poético, labrado intensamente,
por nuestro sentimiento indiviso.
Loado destilar de la luz de mis ojos, dime...
¿Hoy, quien recogerá otro beso acrisolado
de nuestro amor?
Donde aun, destella sobre el mar,
la intensa luminosidad de tu mirada,
mientras sumerjo mi corazón,
y emerge en plenitud...
El dueño de cada beso, elixir de todo mi amor.
El amor, que despierta entre notas majestuosas,
la energía vital, de nuestra sínfonica universalidad...
La confluencia de nuestras huellas,
liberando sellos,
para que emanen prístinos los ojos,
y como brote de suspiros enamorados
retorne cristalino el amor, a nuestra alma.
La ternura, abrazando con sigilo estos versos.
Esa mirada, arrullada con tibieza,
que viaja por el océano de mis ojos,
hacia donde nace, la caricia cantarina,
cultivada por la flor de tu sonrisa vivaz...
¡OH! rayo de luminoso esplendor,
música, poesía, vida eres...
¡Amado mío!...
Precioso el remanso
de tu cálido corazón,
diluido por este virtuoso espacio.
Donde llega, desbordado de ternura,
el inspirador, del rio dulce de mis besos,
y me convierte, en el piélago de su gozo.
Regocijada, en el cielo de sus ojos,
renace la mirada jubilosa.
Plena de ti… ¡Vida!
Derrama la esencia de este amor...
En cada latido poético, labrado intensamente,
por nuestro sentimiento indiviso.
Loado destilar de la luz de mis ojos, dime...
¿Hoy, quien recogerá otro beso acrisolado
de nuestro amor?
Donde aun, destella sobre el mar,
la intensa luminosidad de tu mirada,
mientras sumerjo mi corazón,
y emerge en plenitud...
El dueño de cada beso, elixir de todo mi amor.
ALEGRIA
MARIA RIAL . ISSISORA
-60-
MARIA RIAL . ISSISORA
-60-
Última edición: