JAVIER TOMAS
Sub Administrador
Le veo jugar con su pelota
saltando alegre, con torpeza,
mientras sus ojos iluminados
ven el mundo con inocencia.
Sus risas son trinos primaverales,
algarabía de la naturaleza,
las palabras, aun parcas,
brotan en una cascada sin sentido.
El pelo ya se alborota del sudor
y un rebelde mechón se pega a su frente.
Se vuelve hacia mi sofocado,
los coloretes incendian su cara,
una gota resbala por su sien
y para en su hoyuelo.
Es la estampa de la felicidad,
felicidad que inunda todo
bañando mi corazón,
regando mis ánimos,
inyectándome en vena
algo que con los años olvidamos,
todos hemos sido....
¡NO! todos somos niños.
saltando alegre, con torpeza,
mientras sus ojos iluminados
ven el mundo con inocencia.
Sus risas son trinos primaverales,
algarabía de la naturaleza,
las palabras, aun parcas,
brotan en una cascada sin sentido.
El pelo ya se alborota del sudor
y un rebelde mechón se pega a su frente.
Se vuelve hacia mi sofocado,
los coloretes incendian su cara,
una gota resbala por su sien
y para en su hoyuelo.
Es la estampa de la felicidad,
felicidad que inunda todo
bañando mi corazón,
regando mis ánimos,
inyectándome en vena
algo que con los años olvidamos,
todos hemos sido....
¡NO! todos somos niños.