En tus brazos me quedo adormecida,
apoyando en tu pecho mi cabeza,
abrazando mi carne enternecida,
y mi mente se ensueña con viveza.
Tu ternura conquista el corazón,
es tu beso un bálsamo deleitable,
que provoca y enciende mi pasión,
y mi amor se transforma en perdurable.
Son tus manos...